La salud avícola es un tema prioritario para cualquier productor, ya que de ella depende la productividad, el bienestar de las aves y la inocuidad de los productos avícolas. En los últimos años, la amenaza de la influenza aviar ha puesto en alerta al sector, afectando tanto a grandes granjas como a pequeños criadores.
Esta enfermedad tan contagiosa puede causar pérdidas masivas a tu granja, por lo que es esencial prevenir su ingreso y propagación. Proteger la salud avícola implica aplicar medidas integrales que abarquen bioseguridad, vigilancia sanitaria y uso adecuado de productos veterinarios.
A continuación, te brindamos las principales estrategias para que tu granja esté libre de la influenza aviar.
Tabla de contenidos
Refuerza la bioseguridad en todas las áreas
El primer paso para proteger la salud avícola es implementar un programa de bioseguridad sólido, el cual incluye:
- Control de accesos: cuando personas externas que no forman parte del personal especializado de la granja ingresan en las instalaciones, pueden traer consigo bacterias o virus peligrosos para los animales. Es importante llevar un registro de visitas y restringir el acceso a áreas sensibles.
- Pediluvios y rodaluvios activos: colócalos en todos los accesos con soluciones desinfectantes efectivas.
- Cambio de ropa y calzado: el personal debe usar indumentaria exclusiva para cada galpón.
- Separación por lotes: evita mezclar aves de distintas edades o procedencias, ya que esto aumenta el riesgo de transmisión viral.
Fortalece la inmunidad de las aves
Un sistema inmunológico fuerte es la mejor defensa contra la influenza aviar. Por esta razón, es importante implementar un programa de cuidado animal orientado a la salud avícola, ya que te ayudará a brindar una nutrición adecuada y a prevenir enfermedades secundarias.
- Suplementación con vitaminas y minerales: soluciones innovadoras como ChickBooster® o Chickvit® ayudan a reforzar la condición general y la respuesta inmune del ave.
- Vacunación preventiva: Realiza un cronograma de vacunación para que tus aves estén siempre protegidas.
- Agua de calidad: revisa periódicamente la limpieza de bebederos y analiza la fuente de agua.
- Control del estrés: evita el hacinamiento y las variaciones bruscas de temperatura, factores que debilitan el sistema inmunitario.
El fortalecimiento inmunológico no sustituye las medidas de bioseguridad, pero sí las complementa eficazmente para mantener una salud avícola estable.
Control del transporte de aves
La influenza aviar no solo puede propagarse en las granjas, sino también en el transporte de las aves, ya sea por vehículos contaminados o jaulas sucias. Por ello, es importante establecer normas estrictas para el movimiento dentro y fuera de la granja:
- Utiliza vehículos exclusivos para el transporte de aves y desinféctalos después de cada viaje.
- No compartas equipos, jaulas ni utensilios con otras granjas.
- Asegura que los trabajadores no visiten otras granjas el mismo día.
- Utiliza desinfectantes veterinarios en los pediluvios, rodaluvios y neumáticos antes de ingresar a la granja.
La importancia de contar con un plan de vigilancia sanitaria
La detección temprana de esta terrible enfermedad y de otras es vital para la producción de tu granja. Establece un plan de vigilancia sanitaria, ya que te permitirá actuar de manera inmediata ante cualquier signo. Lo que debe incluir este plan:
- Monitoreo clínico diario: observa cambios en el comportamiento de las aves, consumo de alimento o mortalidad inusual.
- Capacitación del personal: todo el personal de la granja debe saber identificar signos de alarma como estornudos, secreciones nasales o plumaje erizado.
- Registro continuo: mantener reportes actualizados sobre vacunaciones, desinfecciones y visitas técnicas.
La influenza aviar es una amenaza constante que puede llegar a prevenirse con la combinación de limpieza, desinfección, control del tránsito y una nutrición adecuada para aves, garantizando una salud avícola fuerte y sostenible a futuro. Si deseas brindarle los mejores productos veterinarios a tu granja, contáctanos y mejoremos juntos la salud de tus animales.
Preguntas frecuentes
Los síntomas más comunes incluyen disminución del consumo de alimento y agua, fiebre, plumaje erizado, secreciones nasales y alta mortalidad repentina.
Aísla inmediatamente el lote afectado, suspende movimientos dentro y fuera de la granja y notifica a las autoridades sanitarias. No manipules ni traslades las aves sin autorización.
Depende del uso, pero lo recomendable es cambiar el contenido de pediluvios y rodaluvios cada 24 a 48 horas, o antes si hay acumulación de suciedad.